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... "Entonces le dije al viejo cara-de-culo: ¡Ese no es un alto elfo, sino un belfo alterno, ha ha ha!". Rodrik estaba de un humor excelente: la misión había sido rápida y sencilla pues la banda de secuestradores resultó ser de tres orcos; y la compañera que le habían asignado era una ozcura que además de ser una experta con la jabalina era mejor rastreadora que el sabueso de más fino olfato.
A decir verdad al principio no le había caido en gracia que tuviera que trabajar con Mildreth, empezando porque nunca le habían agradado las razas híbridas y mucho menos las que tuvieran cualquier rastro de sangre orca (el apodo de Mata-orcos no era por que su olor corporal fuera capaz de tumbar a uno de ellos). Sin embargo Mildreth era una guerrera innata y masacraba tanto a orcos como no-orcos sin discriminación, además era lo suficientemente "civilizada" como para reconocer que ser un mercenario era un buen negocio, y que era más valioso un saco de oro que media docena de craneos de comerciantes.
Para este trabajo el viejo médico-sacerdote Chitton (también conocido en los reinos de los hombres como Cabeza-de-Trasero Chitton) le había insistido bastante en que aceptara a Mildreth como su compañera en una misión de búsqueda y rescate. Rodrik sospechaba de las fuentes de Chitton, ya que algunos decían que era un nigromante poderoso, pero le parecía bastante interesante que el objetivo del rescate fuera una alta elfina (después de la catástrofe los altos elfos se habían replegado a las regiones más recónditas del continente y eran especímenes cada vez más raros apetecidos por personas muy poderosas); si eso era cierto podrían conseguir algún cliente que pagara una buena fortuna por ella.
- "Eres muy ingenioso Roderric-Mata-Orco, aunque si yo hubiera estado en tu lugar no le habría partido la mandíbula, sino que se la habría arrancado y me hubiera hecho un bonito collar con ella", replicó Mildreth.
- "No lo dudo, pero Chitton necesitaba que el "paciente" estuviera lo suficientemente intacto para que nuestro cliente disfrutara del "tratamiento" que le tenía reservado. Aunque pensándolo bien creo que hubiera sido más afortunado si hubiera caído en tus manos, Millie".
- "Tal vez, tal vez... ahora que terminamos con estos idiotas vamos a echar un vistazo al rescate... espero que estos orcos no la hayan estropeado mucho", dijo Mildreth mientras limpiaba la hoja de su lanza en su faldón...